Seamos realistas. El 80% de las compras al retal se realizan a través de Internet. ¿Vas a perder la oportunidad de crecer por no entender este comportamiento real del consumo? ¿O quizá lo ves, pero no quieres salir de tu área de confort y te engañas a ti mismo diciéndote que este sector no puede desarrollarse sin el contacto físico entre vendedor y comprador?
Todo depende de una decisión y de las ganas de enfrentarse a fracasar varias veces antes de conseguir el éxito con la primera venta en línea.
Mi experiencia en Venta Directa me dice que las personas que se desarrollan aquí ante todo destacan por la valentía de correr riesgos y la fortaleza en sus convicciones.
Luego no esperes más y lánzate a probar nuevas vías de desarrollo, con sus pros y sus contras.
Es un camino largo que puedes acortar si tomas algunos atajos, pero todo comienza transformando tu forma de pensar.
Para algunas personas tener un negocio online es como un hobby, algo que no requiere demasiado esfuerzo ni dinero, pero no te confundas, todo requiere de mucho esfuerzo y dedicación y antes de tener, siempre hay que ser.
Internet puede ser útil para jugar o pasar el rato. Pero las redes sociales tales como Facebook, son medios de contacto que permiten, bien utilizadas, abrir un abanico de oportunidades impresionante.
Son varios consejos que te propicio si deseas empezar a comercializar tu marca en internet, no sin antes recordarte que todas las funciones que realizarás como intermediario de Venta Directa en línea, seguirán siendo las mismas que si las realizas presencialmente.
Qué hace un Comercial de la Venta Directa
¿Cómo?
• Identificando en línea qué tipo de personas son las que pueden comprar tu producto.
• Segmentando en línea sus características para luego hacer campañas con contenidos que les interese.
• Aplicando contenidos en línea de audios, imágenes, vídeos, gif, etc.
• Contactar e interactuar con ellos. Todo para como siempre, generar confianza
Hay mucho que preparar y es necesario que alguien te oriente para empezar y hacerte un camino.
Al principio, puede parecer complicado, pero una vez se echa a andar es como un bebé cuando comienza a caminar. El niño no dice: ¡Ay me caí, ya no aprenderé a caminar! El niño lo intenta una y otra vez hasta que lo hace. Así mismo debe ser con cualquier cosa que emprendas en la vida.
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FC Formación y Consultoría para la Venta Directa
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