¡Claro que es difícil cambiar aun sabiendo que debes hacerlo!

¡Tengo una mala noticia y otra buena!

La mala es que sólo tú puedes cambiar. Es decir, nadie puede ayudarte.

Y la buena es, que aunque estés solo, sólo son tus hábitos y sólo debes cambiar aquellos que te retienen e impiden dar pasos hacia el hacer en positivo. Y me dirás… ¿sólo?

Para que no estés tan solo, te doy el primer consejo y así arranques con orden:

• Vuelve a identificar cuál es tu propósito y defínelo.
• Redacta inmediatamente qué es lo que deberías hacer para dar pasos hacia ello.

Comienza a dedicar tiempo a esas tareas y recuerda que uno de los errores que solemos cometer y que crea mucha frustración, es no disfrutar de los pequeños logros en la dirección hacia nuestro propósito. La calma y la paciencia son claves en este momento. Saborea los pasos dados y celebra contigo mismo que andas en la dirección correcta. No se trata de otra cosa.

Convertir en rutina una actividad productiva permite avanzar, evolucionar y cambiar sin experimentar desorientación además de fomentar nuestra autoestima.

Luego, cambia YA pequeños hábitos y quehaceres de tu día a día para reconducir tu actividad hacia la productividad.

Te lanzo alguna idea que pueda ayudar:

Un profesional de la Venta Directa, Networker o Distribuidor de éxito, por lo general, desarrolla su día a día hacia tres puntos de mira que requieren diferente actividad:

 PRODUCTO
 MERCADO
 COMUNICACIÓN

A lo largo de los días, siempre se ha de atender en mayor o menor medida cualquiera de los tres conceptos para alcanzar el éxito o mantenerlo.

¿Qué tiempo dedicar a cada uno de ellos? En cada persona y en cada momento el % de tiempo empleado en cada uno de ellos puede cambiar en función de las prioridades pero lo importante es que siempre se avance en cada uno de ellos.

Rutinas que permiten avanzar siempre en todos los sentidos:

Nos reciclamos en formaciones para el PRODUCTO o para el desarrollo de nuestras habilidades, podremos informar u orientar a nuestros seguidores y redes.

Trabajamos la prospección constantemente sobre nuestro MERCADO potencial, nuestra base de datos aumentará en el tiempo.

Además constantemente nos COMUNICAMOS publicando quienes somos y qué hacemos y así agilizaremos la búsqueda en la prospección y fluirá la actividad de captación.

Me animo a recordarte pequeños hábitos que pueden ayudarte a avanzar cada día en estos tres conceptos.

• Lee o escribe 20 min cada día. Te permitirá ejercitar y alimentar tu mente de ideas para comunicarte.
• Anota las cosas que te surjan en el momento y la fecha para cuando lo necesitas. Lleva siempre contigo papel y bolígrafo. Ya tendrás tiempo de desecharlo si no es válido y al poner la fecha te eliminará ansiedad y te permitirá centrarte en lo prioritario.
• Cuida tu cuerpo. “mens sana in corpore sano”. Lo hemos oído muchas veces y te sorprenderá lo mucho que se necesita. Incorpora a tu día a día tiempo para cuidarte. Bebe agua, come sano, haz ejercicio. Si reactivas tu cuerpo, despiertas tu mente.
• Esfuérzate en ser conciso y breve en todas tus comunicaciones. Se pierde más tiempo desarrollando ideas que no aportan nada, que pensando antes de hablar o releyendo antes de enviar un escrito. Céntrate en ser conciso y breve.
• ¡Ojo a aquellos que disfrutamos con las redes sociales! Seamos conscientes del tiempo que nos lleva estar pendientes de ellas todo el día. Limita un tiempo ordenado de conexión. Lo contrario te puede llevar a finalizar el día sin haber hecho mucho.
• Escribe al finalizar tu tarea laboral del día tu primera tarea de mañana. Procura empezar tu actividad cumpliendo la tarea que escribiste. Esto, sin duda, te hará avanzar y te sentirás mucho mejor.

Laura Gil
FC Formación y Consultoría para la Venta Directa

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