Uno de los mejores consejos cuando desarrollas tu actividad de Venta Directa, es que controles lo que haces. Apunta estos tips que te detallo y pon foco en ellos. El efecto multiplicador vendrá acompañado como una consecuencia de cada uno de ellos.

Sé el mejor consumidor del producto que distribuyes.

Recuerda que la Venta Directa se basa en la recomendación. No requiere de técnicos especialistas de la venta, aunque con el tiempo entenderás que es interesante ser efectivo y que es productivo formarte y mejorar tu técnica de venta.

Si no utilizas los productos que recomiendas, difícilmente llegarás a convencer a alguien sobre sus beneficios. Debes de ser el primer convencido sobre ello.

Siempre he defendido que te afilies a una empresa de Venta Directa por el producto que distribuye más que por su plan de comisiones o oportunidad. No obstante, tampoco recomendaría no realizar un análisis previo sobre la Compañía y su plan de comisiones y formación antes de afiliarte.

Cuando recomiendes, comienza a trabajar en orden tu lista de contactos y cumple un mínimo de contactos al día.
En un principio esto te sonará exagerado. Pero de lo que se trata es de que vayas empezando a ejercitar para convertir en hábito una rutina diaria.

La prospección en Venta Directa es un ejercicio que debe cumplirse diariamente y así conseguir una lista de contactos ordenada en la que puedas trabajar a posteriori sembrando tu recomendación con ánimo y entusiasmo.
¿El mínimo a diario? 3. Aunque esto dependerá de tu tiempo a dedicar, pero procura mantener ese número para conseguir así una evolución creciente.

Poner orden en tu lista sobre tipo de contacto, cliente consumidor o posible potencial o posible colaborador, te ayudará a dosificar tu mensaje y ser efectivo.

Planifica tu tiempo: Crea tu agenda de actividades y cumple la cita contigo mismo.

Tener día a día establecido tu orden de actividad y cumplir con ello, significará que te proyectas hacia la consecución de algo. Sólo hay que cumplir tu agenda.

Con que apuntes en una hoja cada día lo que has de hacer y lo pases a tu agenda planificada en tiempo real a tu vida, más tarde o más temprano, cumpliendo tus propias indicaciones a tiempo marcado, avanzarás hacia tu meta. Enfócate en lo que puedes controlar. Trabajar con tu propio programa de vida equilibradamente, te permitirá dormir mejor y tu actitud será la idónea.

Te animará de vez en cuando, mirar hacia atrás y comprobar el camino hecho.

Trabaja en tu desarrollo personal.

Asiste a formaciones. Lee libros. Participa en reuniones. La única forma de hacer crecer tu negocio es que primero crezcas tú.

El conocimiento y el desarrollo de las habilidades para mejorar tu productividad son claves en Venta Directa.

Crea un sistema de funcionamiento para tu equipo.

Estructurar, participar y hacer partícipes a los miembros de tu equipo que como tu quiere crecer en un orden de funcionamiento rutinario es básico para crear una máquina de crecimiento constante. Establecer una agenda en común con ellos que cada periodo se repita, fomenta la motivación, reciclaje, entendimiento, aprendizaje, etc.

¿Controlas estos puntos? Si aún se te escapa alguno, mi mejor consejo es que sólo te enfoques en aquellos que puedes controlar. El resto irá sucediendo.

Laura Gil
FC Formación y Consultoría para la Venta Directa

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